Tras las inundaciones de los 80, Artiach, recién adquirida por la norteamericana Nabisco, optó por trasladarse a Orozko, vendiendo las instalaciones a emprendedores de la época.
Según el Master Plan de rehabilitación de Zorrozaurre, aprobado en 2007, la antigua fábrica de Artiach va a ser uno de los dos edificios industriales reutilizados como futuro centro cultural.